miércoles, 9 de julio de 2008

La factura del teléfono


Desde luego, debemos reconocer que el Valencia es capaz de sorprender. Cuando ya todos nos resignábamos a que los "temazos" del verano fueran las salidas de jugadores y las dificultades de la secretaría técnica encabezada por Juan Sánchez para "aligerarle" la plantilla a Unai Emery, va y aparece Villalonga en escena.

En este caso la frase recurrente de que "no por esperado es menos sorprendente" se cumple a rajatabla: efectivamente, las negociaciones llevaban en marcha muchos meses, pero quizá a todos nos haya afectado el síndrome "venta del Levante UD" (también denominado "síndrome del vuelva Usted mañana"), y creyéramos que eso de que Juan Soler iba a traspasar sus acciones al antaño jefazo de Telefónica era como lo de los Reyes Magos o lo de que, si te esfuerzas mucho en la vida, acabarás teniendo tu recompensa: una mentira como una casa.

Finalmente parece que Villalonga no será el nuevo máximo accionista del Valencia, sino más bien una suerte de gestor que se encargará de regir los destinos del club en el momento en que Juan Soler de el visto bueno. En pocas palabras, Juan Villalonga va a ser el que "corte el bacalao" a partir de ahora en la casa de los líos ché. Y parece que esta vez Soler no va de farol con eso de apartarse de la primera línea del frente. Claro, si Soler ya dijo que se retiraba a un segundo plano cuando a finales del año pasado Morera y Salom fueron designados los "delfines", ¿ahora pasará a un tercer plano? Tendremos que verlo para creerlo.

Quizá lo más curioso sea observar, desde la distancia, como lo que en su día se vendió como "una nueva era en el Valencia CF", una etapa de relumbrón, pasta por un tubo y despilfarro a espuertas, ha acabado por fagocitar a su máximo valedor. Hace un par de temporadas Soler tenía en mente la construcción del faraónico Nuevo Mestalla, un equipo que aspirara a todo en Europa, fichajes de renombre... y un remanente de dinero (procedente de fuentes y recalificaciones más que dudosas) para poder comprarse un heladito y todos los cafés que él quisiera. La triste realidad, a día de hoy, es que Soler ha tenido que llamar a Villalonga cual Señor Lobo de "Pulp Fiction": un solucionador de problemas que reflote la maltrecha economía del club, traiga nuevos inversores... En definitiva, que haga las cosas con sentido común, algo bastante novedoso en el Valencia de las últimas temporadas.

La última incógnita que queda por despejar hace referencia a las motivaciones del propio Villalonga al embarcarse en semejante proyecto. Al comerse semejante "marrón", vamos. ¿Se habrá vuelto loco? Se dice que no va a cobrar un duro por su faena, que sus únicas ganancias saldrán de "pequeñas" comisiones tras cada una de las operaciones de patrocinadores, inversores, entidades financieras... a los que logre embarcar en ese yate de lujo a la deriva llamado "S.S. VCF". Está poniendo su reputación en juego, algo bastante peligroso si tenemos en cuenta que todo aquel que manda en el Valencia acaba "per l'aire" con los pies por delante. Por eso no me acabo de fiar. Al igual que reviso minuciosamente las facturas que Telefónica me cobra cada mes, habrá que estar muy atentos a los pasos que de el nuevo "boss" valencianista. No debemos olvidar que este señor fue el de las "stock options"...

4 comentarios:

www.checheche.net dijo...

A mí lo único que no me gusta es que no haya comprado las acciones de Soler. O se está o no se está pero estar a medias es bufar en caldo gelat.

Little

Paco Garcia Polit dijo...

@Little: Sí, parece que Villalonga sólamente quiera meter "la puntita" (obviamente, es una metáfora, no muy elaborada, pero metáfor al fín y al cabo)

www.checheche.net dijo...

Jojojojo, a mí la metáfora me parece ASPACTACULAR, Sr.Polit.

Y sobre Villalonga escepticismo absoluto.

V Molins

Nacho Sapena dijo...

Si la 'puntita' es como el pelotazo/bluff de Terra y las telecos, será pan para hoy y hambre para mañana. Mientras esté al mando, dinerito fresco para todos (y comisiones al bolsillo); cuando quiera estar DE VERDAD cogerá lo que ha ganado de las comisiones y le comprará las acciones a Soler. Recordemos que el pollo de las 'stock options' fue compañero de pupitre de Aznar y buen amigo de Zaplana... menudos referentes.

Saludos célticos